El equipo de Matias Almeyda comenzó su camino por el desconocido Torneo Nacional B jugando de mayor a menor. En los primeros minutos se vio un equipo muy concentrado en la tenencia del balón y en la presión sobre los jugadores Funebreros. Tan solo 11' tardó el Millonario para ponerse en ventaja luego de un corner que Alejandro Dominguez jugó corto para Carlos Sanchez quien envió un preciso centro a la cabeza de Juan Manuel Díaz quien le ganó a su marcador y estampo sobre el palo izquierdo de Tauber el primero y único tanto del cotejo.
Luego del gol River comenzó a controlar el esférico y a generar espacios en el campo de los de Rivoira, quienes esperaban agazapados buscando encontrar alguna contra o pelota parada para lastimar al local, pero que varias veces quedó mal parado al buscar tirar el achique ante los pases cruzados de Dominguez, Sanchez y Aguirre.
Ya en la segunda etapa se vio a un Millonario más replegado en el fondo, cediendole la iniciativa de juego y el balón a los de San Martin, quienes por momentos inquietaron con sus aproximaciones al area que defendía Leandro Chichizola, pero sin poder lastimar.
Entre los de Núñez se destacó la actuación de Alejandro Dominguez quien vino de Europa con mucha experiencia, con gambetas soberbias, pases precisos, preciosos y la inteligencia para no regalarle la pelota al visitante cuando comenzaba a acercarse al arco millonario.
Justamente El Chori tuvo la jugada más clara del equipo en el segundo tiempo en donde Sebastían Pena despejó sobre la linea un remate debil e incomodo del Ex-Valencia, luego de que este se había quitado de encima al arquero funerbrero con una gambeta corta veloz. Sumada a esta tuvo tambien un ramate cruzado que pegó en el palo derecho de Tauber.
El partido terminó siendo poco lucido y muy friccionado debido a la lluvia que castigo el campo de juego durante todo el primer tiempo.
Para destacar en esta primera prueba del equipo de Matías Almeyda, fue la actitud de los jugadores sobre todo en el primer tiempo para ir a buscar el partido, la concentración a la hora de recuperar el balón y la mentalidad para no caerse en el momento en que Chaca comenzó a tener la pelota.
Pero hay que tener en cuenta, que esta es la primera de 37 finales, y que no todos los estadios seran el Monumental, ni tendran el campo de juego en buenas condiciones. Pero hay que esperar con calma, al menos en este primer vistazo se puede apreciar que hay cimientos donde sostener una ilusión, como por ejemplo, la categoría y conducción de Dominguez, El olfato y hambre de gol de Cavenaghi, la potencia, técnica y velocidad de Sanchez y la pegada, tiempo y concentración de Aguirre para recuperar y pasar al ataque.
Con tranquilidad como en la construcción de un edificio y teniendo cuidado en cada paso para que no se caigan a pedazos las polumnas y las ilusiones, y atención ya que aún hay mucho para mejorar, pero eso sí, ya pueden colgar el cartel de esta Obra que busca la reconstrucción de nuestro River Plate, ya que aquí...¡Cuidado, Hay Hombres Trabajando!.
Por Juan Manuel Di Iorio
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